Santiago, 30 de Octubre de 2025.- Con la llegada de Halloween, se anticipa un aumento en la afluencia de peatones en la vía pública, especialmente niños y familias que irán a buscar dulces incluso en horas de baja visibilidad. Dado lo anterior, este escenario genera exige la máxima precaución en la conducción. Ante este panorama, la tecnología vehicular se posiciona como un factor clave para influir en la protección de quienes transitan a pie.
Varios modelos del mercado integran Sistemas Avanzados de Asistencia al Conductor (ADAS) que se centran en la detección y prevención de situaciones de riesgo, elementos que resultan pertinentes en contextos de alta afluencia peatonal.
Felipe Perello, gerente de post venta de KGM, marca representada en Chile por Astara, comentó que “la tecnología disponible hoy en los vehículos KGM, por ejemplo, está diseñada para ampliar la capacidad de observación del conductor, especialmente en condiciones donde la visibilidad o la respuesta humana pueden verse desafiadas. Sistemas como la Frenada Autónoma de Emergencia (AEBS) son cruciales, ya que la detección de peatones y una reacción automática minimiza el riesgo”.
La tecnología ADAS del Torres EVX, el SUV 100% eléctrico de la marca coreana, incorpora la Frenada Autónoma de Emergencia (AEBS), capaz de detectar vehículos detenidos o lentos, y especialmente peatones, aplicando los frenos si la respuesta del conductor no ocurre a tiempo. Este modelo también incluye la Dirección Autónoma de Emergencia (AES), un sistema que asiste la dirección para evitar un obstáculo si el frenado no es suficiente.
Adicionalmente, asistencias como la Advertencia de Tráfico Trasero Cruzado (RCTW) y el Asistente de Colisión de Punto Ciego (BSA) son herramientas que aumentan la conciencia del conductor sobre el entorno, una ventaja al maniobrar en lugares con presencia de peatones inesperados o en estacionamientos. Incluso la Advertencia de Salida del Modo Seguro (SEW), disponible en el Torres EVX y Torres, funciona como un aviso de colisión al abrir una puerta si el vehículo está detenido y detecta tráfico, protegiendo tanto a ocupantes como a transeúntes.
“La integración de estos sistemas es un avance hacia la conducción asistida. Si bien la responsabilidad última recae en el conductor, la tecnología opera como un respaldo constante en situaciones que se puedan dar en la vía pública”, concluye Perello.
 
            





















