Director ejecutivo de Fundación Atacamágica, Luis Albornoz, es impulsor del festival internacional de magia y gestor de diversas iniciativas que combinan la magia y la acción social.
Luis Albornoz acaba de llegar de España, donde participó de un encuentro único con el reconocido cartomago español Juan Tamariz, quien escogió a tan solo cinco magos de todo el mundo y los invitó a una clase magistral durante cuatro días en su casa particular en la ciudad de Cádiz. Juegos de magia, psicología, técnica, efecto, simbolismo y actitud, fueron algunas de las temáticas trabajadas durante las jornadas, que iban de 7 de la tarde a 3 de la madrugada, y que terminaban cada noche con una presentación ante un grupo de espectadores, donde los ilusionistas debían poner en práctica los conocimientos aprendidos.
Sólo unos días alcanzó a estar el mago atacameño en su hogar de Copiapó, antes de partir nuevamente de viaje, esta vez rumbo a Sao Paulo, Brasil, donde será el único chileno representando al país en la tercera edición del Mercado de Industrias Culturales del Sur MICSUR 2018. Se trata de uno de los encuentros de la industria creativa más importantes de Latinoamérica que se llevará a cabo entre el 5 y 9 de noviembre, donde compartirá con más de 20 países los proyectos que Fundación Atacamágica impulsa en la Tercera Región.
Ambas actividades marcan una nueva etapa para el fundador y director del Festival Internacional Atacamágica, el encuentro de ilusionismo de mayor prestigio en Latinoamérica y uno de los más importantes del mundo, que desde el año 2006 lleva doce ediciones logrando acercar el arte de la magia a la comunidad, con artistas de categoría mundial. En torno al evento se realizan talleres para magos chilenos y visitas comunitarias en lugares tradicionalmente aislados o excluidos de los circuitos culturales, como hospitales, cárceles, hogares de menores, sedes vecinales, entre otros.
“La magia también puede servir como un poderoso motor de cambio en la vida de las personas”, dice Luis Albornoz, razón por la cual “nuestra Fundación se dedica intensamente al ámbito social y uno de los proyectos donde esto se materializa es el programa de becas que llevamos junto a Minera Candelaria, donde apoyamos a estudiantes universitarios de Copiapó, Tierra Amarilla y Caldera”. Los beneficiados son 76 estudiantes de familias en condiciones de vulnerabilidad, alumnos del programa PACE del Ministerio de Educación, entre los que se consideran etnias, personas con discapacidad, y una importante dimensión de género, dando prioridad a la presencia de mujeres.
Durante su estadía en Brasil, el director ejecutivo de Fundación Atacamágica fue convocado por el Centro de Investigación del Servicio Social del Comercio de Sao Paulo a dar una charla de innovación social, “En búsqueda de la belleza”, que luego se va a replicar en Buenos Aires, en la academia de magia del gran maestro internacional y premio mundial de magia, Henry Evans. Y los proyectos de la Fundación no se detienen: “estamos en la preparación de Atacamágica 2019, y en el desarrollo de una alianza con la Universidad del Desarrollo para proyectos que unen la magia con la tecnología. Además, estamos investigando una nueva metodología de innovación, basada en atributos del ilusionismo. Todos estos proyectos, esperamos que puedan ver la luz el próximo año”, agrega el mago atacameño.
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