- En Santa Cruz, alumnos de la Universidad de Talca desarrollaron esta experiencia sensorial alrededor del vino con el propósito de generar conciencia turística accesible.
- A través de una experiencia sensorial en torno al vino y con el fin de generar empatía hacia las personas con discapacidad visual, estudiantes de la carrera de Técnico Superior en Turismo Enológico de la Universidad de Talca desarrollaron una cata a ciegas en el Campus Colchagua de esta casa de estudios, ubicado en Santa Cruz.
En la actividad, invitados provenientes de distintas entidades educativas y turísticas de la Región de O’Higgins participaron de esta experiencia que despierta los sentidos y que permite descubrir un vino con objetividad y sin prejuicios.
El proyecto nació en 2017, en conjunto con la Escuela de Kinesiología de la Universidad de Talca, cuyos académicos capacitaron a docentes y estudiantes de la citada carrera técnica para poder generar esta iniciativa. La primera actividad logró una gran aceptación y se realizó con una agrupación de personas ciegas de Hualañé, que nunca habían disfrutado de una experiencia similar.
“La cata a ciegas es una metodología de degustación de vino, pero lo relevante es que nuestros estudiantes puedan adquirir las competencias para relacionarse con personas con discapacidad y hacerlas protagonistas de una experiencia turística”, subrayó el director del Campus Colchagua de la UTalca, Patricio Gómez.
“Un tour estándar implica recorrer viñedos, probar los vinos con todos los sentidos involucrados, y no todas las personas pueden desarrollar la actividad tal cual está diseñada. Ese es un desafío que nosotros le planteamos a nuestros estudiantes como parte de su formación”, añadió.
Por su parte, Angelina Riveros, coordinadora de la carrera, destacó que “con esta iniciativa estamos haciendo conciencia turística y formando a estudiantes con profunda sensibilidad y responsabilidad social. Además, conectamos a las personas ciegas con un producto tan importante como el vino”.
Para los estudiantes de turismo enológico la experiencia es muy gratificante, así lo consideró Carolina Aceituno, quien en el futuro espera con su carrera “generar experiencias turísticas para todos y la cata a ciegas es una actividad que nos permite ser mejores personas y profesionales.