Fuertes críticas a la reforma al Código de Aguas realizó la Asociación Gremial de Riego y Drenaje durante el desarrollo de sus primeras mesas de trabajo para fortalecer la asociatividad y exponer la posición de la industria frente a diversas políticas públicas relacionadas al rubro.
Tras su nombramiento, la nueva directiva de la Asociación Gremial de Riego y Drenaje, encabezada por el ex secretario ejecutivo de la Comisión Nacional de Riego, Felipe Martin, se propuso trabajar durante los próximos dos años en nueve mesas de trabajo técnico cuyo objetivo es visibilizar al gremio, difundir avances tecnológicos de nuevos productos y abordar cambios legales a la Ley de Riego y la Reforma al Código de Aguas, entre otras cosas.
Felipe Martin comentó que mediante el desarrollo de dichas mesas “queremos plasmar nuestra opinión, junto con proponer un diagnóstico claro y preciso respecto de qué piensa la institución sobre la modificación al Código de Aguas y la implementación a la Ley de Riego”.
Frente las modificaciones propuestas por el Gobierno para el Código de Aguas, “se estima que alrededor del 80% de los derechos están en poder de agricultores, lo que debilita el argumento de la especulación, sin embargo, ha existido una escasa fiscalización y nula voluntad política de la autoridad para resolver el tema”, expresó Martin.
En esa misma línea, agrega que “los agricultores no han sido consultados”, lo que se ha podido apreciar mediante las constantes manifestaciones de la sociedad civil, para lo cual desde la Agryd recomendaron que los actores “no sólo deben ser escuchados, sino además sensibilizados ante los cambios que experimentarán, tanto de manera individual como aquellos de carácter transversal que esta reforma busca introducir”.
Asimismo son tajantes en afirmar que “existiría una jugada estratégica del Gobierno al postergar la discusión para después de las elecciones, a la espera de que se resuelvan las candidaturas de los distritos agrícolas y poder influir en ellos”, como también de que las instituciones financieras han sido “los grandes ausentes, quienes no han tomado hasta ahora un compromiso sobre la problemática planteada, donde los pequeños agricultores podrían perder gran parte de sus bienes e inversiones”.
Ligado a lo anterior, está la comisión Riego y Reglamentos la cual posee un enfoque en los cambios legales y reglamentarios asociados a los concursos de la Ley de Riego. Al respecto, hay dos áreas que desea impulsar: disminuir la burocracia en permisos porque frena el desarrollo del país y aportar como Agryd en proyectos a las autoridades.
El coordinador es Marcelo Mourgues (Cepia) quien expresó su preocupación respecto a los criterios de aplicación de la normativa, detallando que, como dice su nombre, su objetivo es fomentar la superficie de riego tecnificado y el uso del agua, sin embargo “hoy día la prioridad no es esa, donde le cambiaron en un 100% su orientación, convirtiéndola en una ley de raźon social de equidad de género y de apoyo a los indígenas, lo que no es fomento al riego”.
Sumado a ello denunció que “existen elementos que confunden la postulación y donde la autoridad ha demostrado no estar disponible para conversarlos” especificando que “se trabajó mucho para generar manuales que fijaran las postulaciones, sin embargo hoy día, todos ellos y a pesar de estar vigentes, los relativizan diciendo que son meramente referenciales. No sabes si las reglas que existen, valen o no, dependiendo de la discrecionalidad de los revisores, donde puedes postular con altas expectativas y resultar tener un proyecto malo ya que tienen la posibilidad de modificar el proyecto como quieran, incluyendo el costo y cálculo de superficie”.
Finalmente, el presidente de la Agryd, Felipe Martin puntualizó que mediante estas mesas se encuentran buscando “dar una representación clara frente a las autoridades y diferentes gremios con quienes nos asociaremos, fomentando la inversión privada, y avanzando en políticas públicas de calidad sobre recursos hídricos y sustentabilidad en Chile ”.
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